CIBERACOSO: UNA AMENAZA REAL PARA LOS ADOLESCENTES EN EL ESTADO DE TLAXCALA

Navegar por Internet ya no es un espacio seguro para los adolescentes. Según la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), hasta un 20.3% de los usuarios de 12 a 17 años han sido víctimas de ciberacoso.

En un informe publicado el 15 de agosto de 2024, la Redim proporcionó estadísticas sobre este fenómeno en cada entidad federativa, revelando que en Tlaxcala, 22,767 adolescentes han reconocido haber sufrido acoso cibernético, lo que sitúa al estado en el lugar 27 a nivel nacional.

Estos más de 22 mil jóvenes representan el 20.3% de la población de 12 a 17 años en Tlaxcala, que asciende a 145,251 personas, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). A nivel nacional, el ciberacoso afecta de manera desproporcionada a las mujeres, con un 29% de ellas reportando experiencias negativas en línea, frente al 22% de los varones.

Los adolescentes tlaxcaltecas enfrentan diversas formas de acoso en línea, que incluyen amenazas de publicar información personal o imágenes, el uso de identidades falsas para hostigarlos, y el envío de contenido sexual no deseado. Además, muchos han recibido mensajes ofensivos, críticas sobre su apariencia o clase social, y han sido víctimas de usurpación de identidad.

En respuesta a este preocupante panorama, Tlaxcala cuenta con una Unidad de Policía Cibernética bajo la Secretaría de Seguridad Ciudadana, dedicada a atender reportes sobre incidentes en plataformas digitales. Las víctimas pueden comunicar cualquier caso de ciberacoso a los números de auxilio 911 y 089, o directamente a la Unidad de Policía Cibernética al 2464652057.

Las autoridades locales recomiendan a los usuarios ser cautelosos con la información que comparten en redes sociales, no brindar contraseñas a desconocidos, y monitorear el uso de sus dispositivos para identificar accesos no autorizados.

El ciberacoso es un problema creciente que requiere atención y acción, tanto de los adolescentes como de sus familias y autoridades, para garantizar un entorno digital más seguro.

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