EL HISTÓRICO HOSPITAL GENERAL DE TLAXCALA ES DEMOLIDO; AVANZA LA TRANSFORMACIÓN DEL ESPACIO

El Hospital General de Tlaxcala “Dr. Miguel Lima Ramírez” es ya parte del pasado, pues más del 75 % de su infraestructura ha sido demolida por una empresa contratada por la Secretaría de Infraestructura. Se prevé que la demolición concluya a más tardar a inicios de marzo, dejando libre un terreno de más de 7,100 metros cuadrados.

Desde mediados de diciembre, los trabajos de demolición han sido constantes. Día tras día, camiones de carga entran y salen del sitio, trasladando los escombros para despejar la zona. Aunque aún no se ha definido un proyecto definitivo para el terreno, autoridades han mencionado la posibilidad de construir un parque ecológico que fomente el esparcimiento y la convivencia familiar.

UN EDIFICIO CON HISTORIA

El hospital, que por décadas brindó atención en terapia intensiva, urgencias, quirófanos, consultorios y más, quedó inhabilitado durante un año y nueve meses tras los daños estructurales ocasionados por los sismos de 2017. Ante su deterioro y la imposibilidad de adaptarlo para otro uso, el gobierno estatal determinó su demolición en 2023.

Con la apertura del nuevo Hospital General de Tlaxcala “Licenciado Anselmo Cervantes Hernández” en la zona de hospitales, tanto el personal médico como los vendedores ambulantes y los «viene viene» se trasladaron a la nueva sede. Sin embargo, en los últimos meses, el bullicio ha regresado a la zona debido a los intensos trabajos de demolición.

EL PROCESO DE DEMOLICIÓN

Antes de proceder al derribo total del edificio, se realizó el desmantelamiento del mobiliario en comodato del O.P.D Salud de Tlaxcala, así como el retiro de vidrios y cancelería para su posible reciclaje. Además, se deshabilitaron las conexiones de energía eléctrica, agua potable y gas para evitar cualquier riesgo durante los trabajos.

Inicialmente, los residuos pétreos se acumularon en el lugar para facilitar el acceso de la maquinaria a las zonas superiores del edificio. Ahora, estos escombros han sido retirados para continuar con la fase final de la demolición y dejar el terreno completamente limpio.

La transformación de este espacio representa el cierre de un capítulo en la historia de Tlaxcala y el inicio de un nuevo proyecto que, de confirmarse, traerá un beneficio directo a la comunidad con áreas recreativas y de esparcimiento.